sábado, 27 de agosto de 2016

Me quedo contigo


Hoy te vas de mí,
pero me quedo con
todo lo que me diste.

Me quedo con tu sonrisa,
ésa, que junto con tu mirada,
fue inspiración y beso.

Me quedo con tu poema,
ése, que naciendo de tu corazón,
logró tocar al mío.

Me quedo con aquellas líneas,
ésas, que nunca te atreviste
a hacerlas tuyas.

Me quedo con tus palabras,
ésas, que sin pronunciarlas 
atraparon mis sonrisas.

Me quedo también con las cartas, 
ésas, que por volar entre nubes,
se quedaron sin ser canto.

Me quedo por fin con la imagen,
ésa, que con el alma y corazón,
un día me dijo "te amo tanto".


Sueños (Arepo)



Me diste
sueños para
 sonreír cada día
esté despierta
o dormida.

lunes, 27 de junio de 2016

Dicen

Dicen 



Dicen que uno no puede quedarse en un sentimiento por siempre cuando éste no puede realizarse y ni siquiera debió haber nacido; que debemos ventilar nuestros latidos haciéndolos que se paseen en nuevos corazones para seguir viviendo. 

Dicen, que si un amor nació y creció, éste morirá si no es alimentado en presente y en presencia por más sublime que sea, mucho más si surgió entre el caos de lo imposible.

Dicen que no podemos llamar vida si pasamos nuestra vida en función de otra, que si el amor duele, no es amor porque el amor debe llenar de sonrisas no de lágrimas. 

Dicen... todo pueden decir; y tal vez todo eso que dicen esté lleno de verdad y razón. 

Pero qué puedo decir, si yo sólo escucho lo que aclama con fuerza mi corazón, ese sentir intenso, inquebrantable y permanente que me llena desde que tú me habitas; porque todo lo establecido como regla en el mundo, para mí dejó de ser cierto, que éste amor se abrió camino en un lugar y momento insospechado, que todo logró ser posible por el simple hecho de permitir que así sea. 

Y aquí estoy, sin escuchar a nadie más que a éste corazón que te pertenece y sabe que no puede haber lugar más cierto y sublime que latir en tu pecho. Y que no importa las lágrimas, dolor y muerte, su ya fui vida en tu vida, sonrisa en tus labios y alma en tu alma. 

Sí, y me quedo así el mundo, el cielo o el universo mismo me digan lo contrario, porque en realidad tu amor no me dio alas, me dió raíces, de esas que perduran más allá del tiempo.

 

jueves, 8 de diciembre de 2011

ENTRE TU Y YO

I


Me miras, te sonríes.
Te miro, y te alcanzo.
Te siento entre mis labios,
y calmas mi ansiedad,
sobre lo que pienso
y sobre lo que trato de hacer.

Conoces de mí más que yo de ti,
y en medio de tu cuerpo
como de tu misma alma
salta una estrella para alcanzarme.

¿Cómo hacer para alejarme de ti;
para evitar que se desborde
mi mar de ilusiones,
y que se termine este temor
de amar y amar,
entre aurora y canto?

Todo lo entiendes
hasta hacia dónde van mis miradas,
por esto de andar siempre conmigo.
De dejar que te aprisione,
te acaricie, y dialogue contigo.

Porque estás en mí
en medio de lo mío.
Aquí mismo entre mis letras,
y te tengo, aún sabiendo
que un día te irás de mi vida,
llevándote mi fuego y mi calma.

miércoles, 12 de octubre de 2011

DEJAR DE AMARTE

Para dejar de amarte
debo arriar la bandera del Sol
que icé hace tiempo.

Detener el cauce
que inventé en mi cuerpo,
soltar la nave
que ancló en mi puerto,
desbaratar pañuelos
y verlos solos
irse con el viento.

Ver morir dos lágrimas
por lo que se queda adentro
y permanecer contemplando mi cadáver
que se llena de despedidas y regresos.

No quiero despeinar la idea
y el hecho que te quiero;
viro la hoja y firmo:
"Para dejar de amarte
debe morir mi verso".

Cómprame una entrega


Desde ayer te espero
con el paso de todo lo que toco.
Me encierro en mis anhelos
tratando de encontrarte
a la vuelta del tiempo
o en el mismo calendario.

No vuelves. No regresas.
No sé de tus misterios

Desde ayer me ilusiono
por cosas que irreales
como tu piel despierta
mordida por mis labios.
Como tu pecho de fuego
palabra de pecado
oración de paganos
en medio de la entrega.

No sé si hago mal
en querer ser tu dueña.
Pero llevo en mi fuego
un pagaré vencido
dejado por tu cuerpo.

No reclamo intereses
reclamo el pago de la deuda.
Y si no es mucho pedirte,
a lo mejor cancelo
con solo tu respuesta
de pasos a mi destino
el tiempo de la espera

martes, 4 de octubre de 2011

CARTA

Escribo para ti 
aunque sé que sigues la ruta de otra Luna.
Escribo para ti 
como si fuera al mar
a hablarle de las cosas de los días de espera.
Cuando bien lo sé
que el agua pondrá lazos a mis palabras nuevas.

Escribo para ti 
por tu enjambre de hechos
por nuestros días de fiesta;
quizá por lo que no recuerdas
tu anhelo entre mis manos
mis labios en tu color relámpago
y mi fuego al habitar tus sueños. 

Escribo para ti 
sabiendo que no sabes
que llevas una dulce sonrisa debajo de los ojos
ni que tienes un Sol levantando en tu rostro.

Escribo para ti 
cuando vas fugaz para mí 
y llevas prisa de ausencia.

Escribo para ti
porque no puedo amarrarme a tus brazos
y dejarte marchar
de todos mis contornos
como algo que fue sólo
un nuevo despertar.